febrero 21, 2011

Ganas de escribir y no hacerlo.

Verás, uno siempre quiere vomitar... - sí? - Sí, por eso tomamos tanto, osea, los malos libros hacen malas costumbres y las malas costumbres buenos libros, y escribir bien, (algo que no hago hace mucho tiempo) requiere altas dosis de pena, de locura, de serotonina, de cafeína, de nicotina, y sobre todo, de alcohol, nada de rones caros o baratos, con bebidas de fantasía que, en realidad fueron inventados por minas para suavizar la verdad (algo que las mujeres, casi por genero, aprenden por Arte, a la larga... y la suavizan tan bien, que no parece una verdad importante: todo es importante). No, Yo hablo de alcohol real, de whiskey, whisky y socotch.-.. de ideas claras como el vodka, y frías como el infierno, de emociones masticadas como esos buenos vinos frutales, que recuerdan el por qué, al vino le llaman "La Sangre de dios" lo cual podría aplicarse a la cerveza como: orina divina... pero eso es otro cuento, y sigue siendo, plausible, embriagarse y escribir.... tal vez incluso sea plausible que este escribiendo en el borde de mi ventana, a la sombra... pero no, por que estoy escuchando Jorge Drexler y solo bebí una cerveza... ok.... salí, de nuevo, desvariando...


No podemos escribir relatos masticados sin antes habernos masticados a nosotros mismos en un averno terrible de sonora muerte embriagante.... no podemos hablar de amor sin antes haber sufrido por el, y no podemos llamarnos "Ex fumadores" sin un dejo de distancia y nostalgia atiborrante... al haber dejado esa delicia de marlboros rojos, y Lucky strike red, originales, dulces y ásperos, respectivamente; Tal vez tenga que ver con el gusto, con cual es nuestro punto, nuestro sino terrible de desvíos inmorales en tiempos memorables.... cuando por alguna razón el cerebro decide esquivar balas olvidando que el corazón recibe otras a su debido tiempo, en una constante de causa y efecto terrible... Era como aquellos tiempos campestres en los que nos sentábamos a mirar el movimiento del vietno y las formas en el agua, a disfrutar de la sombra y el aroma de arboles de todo tipo, de duraznos que caían, de patos graznando, de momentos sutiles, mágicos, necesarios para escribir, al extrañarlos en la vorágine de la vida citadina... entre vasos de alcohol, entre recordar mujeres mágicas entre perfectos mortales... y es así, como vamos cayendo en una constante desgarradora, sutil y fatal, de falta de todo, y el aire en nuestros pulmones e vuelve denso, y nos obligamos a escapar...


Importa si alguien lee? , Claro que importa... sería tiempo perdido, y delicioso Jazz desperdiciado (sí, escucho Jazz, Jódete) Sería un efecto alcohólico de letargo que podría haber sido ocupado en otra cosa, peor el tiempo no existe cuando escribes, no existe nada ni siquiera tu mismo... Solo un tipo, comunicándose con dios.


Tal vez hayan muchos cielos, Maga.

1 comentario:

cualquier parecido con la realidad, o con persona viva o muerta, No es una Coincidencia, las coincidencias, no existen.



Hay que expresar la libertad, de hacer lo que quieras, tal y como quieras, siempre que lo hagas con pasión.